El papel térmico, ampliamente utilizado para emitir recibos de compra, es una fuente importante de riesgo al bisfenol A (BPA), advirtió el jueves un informe preliminar de la Autoridad Europea de Seguridad Alimentarias (EFSA).
El papel térmico “representa la segunda fuente más importante de BPA para la alimentación”, dice el informe preliminar.
“Sin embargo se han señalado dudas con relación a la fuente de exposición del papel térmico, por lo cual deben recabarse datos suplementarios, en particular sobre la absorción cutánea de BPA y la manipulación de los tiques de caja”, indicó el informe.
Desde enero de 2011, la Unión Europea prohíbe por precaución la fabricación y comercialización de mamaderas que contenga bisfenol A.
Esa prohibición debe extenderse a todos los recipientes para alimentos a partir de julio de 2015 en Francia.
Para los bebés de menos de tres meses, “la exposición de los alimentos al BPA está en un nivel 30 veces inferior” al constatado en el informe de 2006, indicó la EFSA.
En lo que tiene que ver con los adultos, la “evaluación de 2013 está en un nivel de alrededor 11 veces inferior” con relación a 2006.
El BPA es sospechoso de afectar el desarrollo cerebral del feto y de los recién nacidos.
También se lo vincula al cáncer de seno y de la próstata.
